En esta categoría encontraras la caseta de jardín que necesitas ya que disponemos de múltiples medidas, tamaños, colores y materiales. Un cobertizo te permite guardar las herramientas de jardín y protegerlas de las inclemencias del tiempo. No solo tendrás el entorno recogido y con un orden visual importante sino que además tus cosas estarán protegidas y su vida útil y su aspecto mejorarán y se alargaran bastante en el tiempo.
El sol es nuestro aliado, el sol nos da la vida y la alegría pero también tiene un poder de envejecimiento sobre los materiales si su radiación persiste en el tiempo por los rayos ultravioleta. No hay material que se le resista, todo acabará siendo afectado en el color y en las propias propiedades del elemento sea de madera, hierro o plástico. Otro elemento que hace envejecer prematuramente nuestra herramienta y utensilios es la humedad y el agua. Por eso es tan interesante encontrar la manera de proteger nuestras cosas de las adversidades ambientales mediante un cobertizo de chapa galvanizada, de madera o de resina.
Lo primero que debemos de hacer es pensar bien que vamos a poner dentro, es fácil que inicialmente se adquiera de un tamaño dado pensando en que vamos a guardar ciertas cosas y que en apenas unos meses, o cambiemos su función o le metamos muchas más cosas de las que habíamos pensado inicialmente y ya se nos quedan cosas arrinconadas en el fondo que se hará más incomodo sacar.
Con la lista de cosas candidatas a ser guardadas sacaremos las medidas de la caseta de jardín que nos hacen falta (alto, ancho y fondo) y mediremos sobre el terreno que el la ubicación elegida es la idónea.
Preparación del terreno. Una vez los puntos anteriores están claros, se preparara el terreno para el anclaje. Recordar que la mayoría de las casetas de jardín no disponen de suelo y necesitan ser atornilladas sobre un suelo firme como el terrazo, cemento etc que será el que hará de suelo una vez esté la caseta de jardín montada.
En el caso que tengamos césped o tierra, haremos una cimentación que será de tamaño un poco superior al que nos marque la caseta de jardín. Bastará con que le demos 25-30cm de más al área de superficie del cobertizo elegido. Perfilaremos el área para el encofrado, pondremos un mallazo de hierro para evitar que el hormigón se agriete y le daremos algo de altura sobre el terreno a fin de que no nos entre tierra y agua. Una vez terminado se remata por arriba con algún tipo de azulejo para que nos facilite la limpieza en su interior.
Entrada de veiculos. Si el tamaño y el destino de la caseta de jardín es guardar un coche o un tractor, adicional mente deberemos de hacerle una pequeña rampa de acceso.
Aunque la zona esté iluminada, si se puede dar el caso que tengamos que buscar algo por la noche, deberíamos de replantearnos poner un punto de luz en el interior. Nos será fácil anclarlo siempre que lo pongamos en uno de los perfiles de la estructura nunca sobre la chapa de revestimiento. Si la caseta de jardín es metálica, también tenemos la opción de poner un punto de luz fijado con imanes de esta forma además de ser más sencillo nos permite mover el punto de luz dentro de la caseta de jardín a fin de poder enfocar la zona concreta que deseemos.
Normalmente utilizadas para guardar herramientas de nuestra casa de campo o jardín, las casetas de madera darán a tu jardín el aspecto que se merece, mucho más ordenado y con la estética de madera natural.
El metal es uno de los materiales más resistentes para exterior. Desde arcones para las cosas más pequeñas, casetas para las herramientas e incluso garajes para guardar el coche, los diferentes tamaños y calidades, seguro que encontrarás la solución que mejor se adapta a tu espacio
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